Marissa Mur: «Mi objetivo es sanar a la gente como a mí me ha sanado la música»
«ALL INCLUSIVE” es el título del tercer álbum de la cantautora mexicana Marissa Mur con el que busca tocar los corazones de su público con un mensaje de positivismo, buena energía y amor, a través de un único Pop Tropical.
Previo a su primer concierto en Lima en La Noche de Barranco, con el que dio inicio a su gira ‘All Inclusive’, pudimos conversar con Marissa y conocer un poquito más sobre su proyecto musical que ya se ha convertido en uno de los más relevantes en la escena independiente de la industria musical en México.
Es la primera vez que pisas Perú, inicias tu gira ‘All Inclusive’ aquí. Nos sentimos especiales de que empieces aquí con esta fecha.
Marissa: Feliz de estar aquí. En tu casa; en tu ciudad; en Lima. Como dices, es la primera vez que vengo a tu país. Lo estoy disfrutando: lo estoy caminando; lo estoy comiendo. Entonces, he tenido la oportunidad de gozar un poquito antes del concierto. Y, muy emocionada porque empiezo mi gira el ‘All Inclusive aquí’, lo cual me emociona más. Es la primera vez que salgo de mi país para llevar mi música a otra parte y muy feliz de cómo lo han recibido. Ayer, me dijeron que solo quedaban 3 boletos para el Soldout, entonces estoy muy agradecida con todos los fans peruanos y peruanas que me van a acompañar este viernes en la Noche de Barranco.
Qué bonito saber que estás cerca al Soldout en tu primera fecha en un lugar icónico para los músicos independientes como lo es La Noche de Barranco.
Marissa: Pues, como te digo, estoy muy feliz. Tengo la fortuna de traer a dos de mis músicos y ese concierto se va a bailar, se va a cantar, se va a llorar, se va a hacer de todo. Lo importante es que gocemos juntos y la pasemos bien y que se queden con ganas de más para volver muy pronto.
Cuando llegó tu música a nosotros, recuerdo que la primera canción que escuchamos fue «No necesito más» con un toque caribeño y la reacción del público fue muy buena. Tienes unos fans muy bonitos aquí y he visto que manejas de una manera muy personal tus redes para comunicarte con ellos. ¿Ya has tenido la oportunidad de cruzarte con alguno que te haya reconocido?
Marissa: Todavía no. Yo creo que va a ser hasta el concierto, pero sí estoy muy emocionada. Es un disco que me ha llenado de muchas emociones bonitas de cómo lo ha recibido la gente. Es un disco de una fusión de géneros tropicales caribeños. Hay merengue, hay bachata, hay calypso, una fusión de un bolero con un chachachá y son canciones en su mayoría de amor. Sólo hay una canción que tiene una temática triste pero la música es súper bailable, porque me encanta que, si va a ser la letra triste, que la música esté prendida para que, como mis fans dicen, puedan «lloribailar». No saben si llorar o bailar.
Es un disco con temáticas que hablan del amor propio que es un tema que nunca había tocado. De repente siento que a veces cuesta hablar un poco de eso y desnudar el alma completamente. Hay una canción que se llama «Ay, ay, my love» que habla justo de ese proceso por el cual pasé. Es un proceso espiritual, de ese proceso de crecimiento personal para llegar hasta donde estoy y encontrar esa felicidad que dicen. Pero creo que de repente te das cuenta que la felicidad es todos los días; es encontrar ese momento de estar en paz y en sintonía con uno mismo y, obviamente, hay destellos de mayor sonrisas, de risas y de gratitud ante la vida, pero creo que la felicidad está en uno mismo. Entonces es como algo que me ha dejado este disco de aprender a disfrutar el momento y vivir la vida y ser feliz con lo que tengo y con lo que soy y con la gente a mi alrededor.
Creo que muchas veces se ha normalizado el sufrir por amor. En tus canciones tú transmites sobre un amor bonito.
Marissa: Sí, yo apuesto por ese mensaje de amores bonitos. Esos amores que te suman, que te impulsan a ser mejor persona cada día. Y de eso hablan mis canciones. No digo que mi vida sea color de rosa todos los días, pero, como te digo, trato de estar en sintonía y en equilibrio y aprender a superar la adversidades de manera positiva y salir adelante. Creo que todos tenemos problemas en el camino o piedras que se nos crucen en el camino, pero lo importante es aprender a sobrellevarlas de la mejor manera. Y eso es lo que trato a través de mi música; compartir ese mensaje positivo. Ese mensaje de amor porque yo sí creo en los amores bonitos y creo que no se tiene que sufrir. Yo creo que el amor que es verdadero se construye de la mano de otro persona y es fácil, osea no tienes que forzar tanto para que salga. Obviamente yo no soy psicóloga ni mucho menos; en mi experiencia eso es lo que me ha dejado el amor y creo que hay que vivirlo y hay que arriesgarse y obviamente todos pasamos por malas experiencias, por malas relaciones, pero creo que la vida si no la compartes con alguien no te sabe igual.
Este mensaje que tu transmites ahorita, no solo lo has plasmado musicalmente o líricamente sino también, a través de tus videoclips, vemos el arte súper colorido que hay disponible diferentes sabores no solamente uno. Nosotros como fans vemos el resultado final, pero ¿Cuál fue el proceso de darnos este disco con un concepto totalmente diferente?
Marissa: La parte colorida viene de un proceso en el que (muchos no saben) yo antes me vestía de negro prácticamente todos los días. Entonces mi evolución musical fue a la par de mi evolución personal. Me encanta el color negro porque es súper elegante. No tengo nada en contra del color negro, me sigo vistiendo de negro, pero sí aprendí que no era nada más ese color. Yo creo que los colores te llevan a ciertas emociones, ciertos sentimientos. De repente, tenía el cabello muy largo y me escondía detrás de mi cabello, entonces como que dije «no, yo no soy nada más esto; yo tengo mucho más que dar». Y para mí los colores son vida. Hoy me levanté y veo mi closet y digo «hoy me siento de color rosa o de color verde» y como que así me visto ahora y así me siento y se me hacía muy importante plasmar eso en la parte visual, en los videos, en la música caribeña. El Caribe es súper colorido y te da vida y te pone feliz y te pone en otra sintonía emocional. Como dices, detrás de mi proyecto, de Marissa Mur, hay mucha gente como mi manager Mónica Tannus, La Catrina Films, que es la productora de videos con la cual llevo trabajando desde mi disco pasado, desde la canción de «Darlo Todo», Verushka Nevares que es mi directora de arte, los músicos de mi banda que me han acompañado y mi productor. Entonces hay mucha gente detrás que, a lo mejor, los fans no conocen, pero que sin ellos esto no sería posible y estoy aquí gracias a ellos también porque han sido una familia que me han apoyado durante muchos años y se ve el resultado. No nada más este logro es mío, sino de ellos también.
Entiendo que tu inicias 2015. Ahora que ya estamos en el 2022, son 7 años de carrera pública tuya como artista. Ha sido un largo camino. Son 7 años con bastante aprendizaje y una evolución muy bonita. Si nos transportamos ahorita al primer disco, cómo tu verías a la Marissa de ese entonces. Ese fue tu primer proceso para conocerte a ti como artista, vienes de Hermosillo y vas hacia CDMX. ¿Cuáles fueron los retos que tuviste que afrontar? Si se encuentran la Marissa de ese disco con la de ahora y tuvieran la oportunidad de intercambiar algún sentimiento, ¿cuál sería?
Marissa: Son muchos sentimientos encontrados, porque como dices yo vengo del Norte de México, de una ciudad que se llama Hermosillo, que es bastante tranquila comparada a la Ciudad de México. Me acuerdo que llego a CDMX y me encuentro con la parte de una vida muy acelerada, de empezar de nuevo y vivir por primera vez sola. Yo he sido siempre súper hogareña y no salía de mi casa hasta que me fui a CDMX a buscar este sueño; a hacer mi música; de estudiar música formalmente. Entonces fue complicado. Estar sola al principio me costó, porque siempre estaba mi familia. De repente, cierto ruido de la familia de las personas con las que vivía y de repente también el ruido de la ciudad. Yo estaba acostumbrada al silencio. De cierta manera, es muy loco no, porque tenía ruido en mi casa, y llego a CMDX y es ruido, caos, pero ese caos que aprendes a amar y que ya llevo prácticamente 16 años viviendo en esa ciudad que me ha regalado muchas cosas bonitas, otra familia, amigos.
Y, ¿qué le diría a esa Marissa? Que no tuviera miedo, que se arriesgara a compartirse con el mundo tal cual es. De repente, te pones máscaras, como que estás en la búsqueda de aprender quién eres. Musicalmente también como que no sabía hacia dónde ir. Estaba también estudiando. No tenía claro el mensaje que quería compartir. Obviamente es un disco que agradezco y que hasta el día de hoy hay algunas canciones que me siguen pidiendo de ese disco. Muchas de esas canciones han formado parte de soundtracks de películas y series. Entonces, es un primer disco que abrazo como si fuera esa niña interior y que me ha dejado muchas cosas bonitas. Si lo escuchas, es un disco muy pop, muy diferente a lo que hago ahorita; de alguien destrozado. Esa niña me llevó a lo que yo soy ahorita, entonces yo creo que es importante abrazar todos los proceso que vivimos. De repente, damos por sentado lo que tenemos o pasamos por alto un duelo y, claro, quién no quiere pasar por alto un duelo. A veces duele muchísimo sanar.
Creo que fue importante aprender de esa evolución personal y decir «esta soy yo con mis sombras y con mis luces y me abrazo y esta es la que soy ahora». Todo es bueno. Cualquier proceso te da una enseñanza y a mí ese disco me enseñó qué es lo que quería hacer, qué es lo que no quería hacer y fluir y dejarme llevar. No pensar tantos las cosas. De repente, pensamos demasiado le va a gustar o no lo va a gustar a la gente y creo que obvIamente hacemos música para los demás, pero yo hago música, yo empecé haciendo música para sanarme a mí. Empecé escribiendo poemas. Era una chica muy penosa (aunque no parezca en este momento) me costaba muchísimo transmitir mis emociones. A los 8 años una Navidad me llegó mi primer guitarra y desde ahí empecé a tocar la guitarra y, pues, obviamente estaba chiquita. Todavía no sabía tocarla muy bien, pero me acuerdo que a los 13 años dije «por qué no intento hacer una canción» y pasé de hacer poemas a hacer una canción. Llegó esa primera canción y afortunadamente Dios me sigue enviando la inspiración para seguir haciendo más canciones. Todo ha sido un proceso de sanación para mí.
Para mi la música te sana, te lleva a distintos lugares y eso es lo que trato de hacer con mi música y mis canciones. La música se trata de eso, es un puente que nos ayuda a conectar con distintas personas que no conocemos y a pesar de no conocernos nos conecta. Esa es la magia de la música.
Previo a este lanzamiento de tu tercer álbum, una de tus canciones que escuché primero fue «Darlo Todo». Ese sentimiento por el cual tu estabas pasando y que plasmaste a través de esta canción permitió que muchas personas se identificaran por un momento difícil que entiendo vivieron por México. Y creo que no hay algo tan tangible como lo que te pasó con esa canción. Es una canción que te da ganas de llorar. Que sale de aquí (el corazón) Literalmente darlo todo.
Marissa: Fíjate que fue una canción con la que lloré. No la podía terminar de componer, porque estaba llorando. Y de repente, es como fuerte, como ciudadano y como alguien joven no sabes qué puedes hacer para sanar o para ayudar a tu país y mi manera de hacerlo fue a través de la música que es lo que sé hacer. Era un momento, me acuerdo, en que estaba en mi departamento en Ciudad de México y estaba muy triste y no sabía por qué. De repente, ves tantas noticias en su mayoría negativas que decía por qué está pasando esto. Venía de un primer disco con el que no me sentía al final del todo conforme, porque decía esta no soy al 100 yo. Me puse a estudiar más, tuve más clases de guitarra (hasta la fecha tengo 2 veces a las semana clases de canto. Me gusta seguirme preparando). Y me acuerdo que hice una pausa y dije tengo que nutrirme y escuchar música nueva; otros géneros. Ahí fue cuando me empapé de la música latinoamericana y empecé a escuchar distintos géneros y ahí empezó mi amor por la fusión de géneros. Ese disco «Amores» me dio todo y me acuerdo que cuando compuse esa canción (a principios del año del 2017) llega un punto en el que dije no sé hacia dónde va mi carrera musical, no sé hacia dónde va mi segundo disco, pero el primer sencillo que voy a lanzar quiero que sea esta canción de «Darlo Todo».
Yo creo que si intento hacer una canción hoy en día igual, no me saldría. Fue una canción que llegó de una energía del más allá, me la dictaron y que no supe ni en qué momento la terminé. Recuerdo que cuando la terminé dije «No sé hacia dónde va mi carrera, pero esta es la primera canción que quiero compartir por el mensaje», porque sentía que era más fuerte de todo lo que yo tenía dentro. Dije, la quiero sacar el 15 de septiembre el día de la Independencia de México y fue muy loco porque si las esuchas puede tener 2 connotaciones: una política y una no tanto. Recuerdo que salió el 15 de septiembre y vino el terremoto y, como dices, la gente empezó a compartirlo en los chats de ayuda. Es impresionante el destino de las canciones y esa intuición mía de querer sacarla sin yo saber todo lo que iba a pasar. Porque tampoco soy adivina, pero fue impresionante y al final fue muy loco ese parteaguas en mi carrera y cómo veo yo la música; como una sanación. De repente, me felicitaban porque estaba en los charts, era la número 1 y yo decía «pero es que no estamos en el momento de celebrar». Fue como un sabor agridulce para mí, pero después aprendí que la vida es eso, que no sabes en qué momento pasan las cosas.
Aprender a abrazar los momentos y atesorar esos recuerdos que te llenan el alma y el corazón y ver esos momentos donde la gente se une. A veces se nos olvida. Somos poco empáticos en el día a día y no creo que de manera negativa o con dolo o intención, sino que cada quien va en su camino buscando sus sueños. Si me dices a mí cuáles son tus sueños: colaborar con más gente y hacer más canciones y más música. Vamos en un camino y a veces se nos olvidan los demás. Eso es un gran aprendizaje que me ha dejado esa canción; como ser más empática, mirar al de al lado. De repente una sonrisa le puede cambiar la vida a otra persona entonces trato de ser más cuidadosa con mis palabras; también con el mensaje que uso.
Tardé como un disco para encontrarme y encontrar ese mensaje. Tenemos que ser muy cuidadosos con nuestras palabras y el mensaje que compartimos, porque también una palabra que dices mal a otra persona lo puedes traumar. Suena como absurdo o exagerado pero puede pasar. En la mayoría de mis canciones comparto ese mensaje de amor, ese mensaje de esperanza. Y si hay canciones tristes como «Darlo Todo» o «Que te vaya bonito» con temáticas tristes, trato de abordarlas de una manera no en cuestión de burla o sátira pero en cuestión de vamos a reirnos de lo malo que nos pasa y también sobrellevarlo de otra manera para que no sea tan doloroso el duelo.
En México, tienen un público que recibe de una forma muy bonita las canciones. Cuando fue tu primera tocada ¿Cómo te sentiste? Y, ¿Cómo has ido evolucionando, a nivel de presentaciones, como artista? ¿Cuáles son tus sentimientos sobre el escenario?
Marissa: Pues yo creo que los nervios siguen estando y estarán toda la vida. Si en algún momento dejo de sentir nervios, ya me voy a dedicar a otra cosa. Yo creo que los nervios obviamente aprendes a manejarlos y a sobrellevarlos de disntinta manera, pero siempre están. Ese rush de adrenalina que te da antes de subirte al escenario y con el cual empiezas. De esa primera Marissa que se subió al escenario, ahora creo que hay una confianza detrás de una familia de músicos que me acompañan siempre y esas mismas ganas que no se pierdan de subirme al escenario y compartir mi música. La única diferencia es que tengo un mayor aprendizaje y experiencias. Pasan cosas distintas en el escenario todos los días. Cada concierto es diferente. Como un beso; nunca se repite un mismo beso. Trato de disfrutar al máximo y lo que quiero dejar en cada concierto es que se vayan felices, que hayan disfrutado y entregar mi alma en cada concierto.
Cuando las canciones tocan mucho el corazón de un fan expresan su amor de muchas formas, a través de carteles, etc. Tienes tal vez alguna anécdota de parte de tus fans.
Marissa: No tanto en los conciertos, sino en Meet & Greets que se han puesto a llorar y de repente es demasiada ternura de no saber qué hacer, porque para mí también es una alegría y es un honor que los fans y la gente que conoce mi música por primera vez me deje entrar a su hogar a través de mis canciones. De repente, me escriben historias que gracias a esa canción se la dedicó y llevan tantos años de relación. Entonces es bien bonito. O gente me escribe «estaba súper deprimido o deprimida y estaba en un momento súper triste de mi vida y gracias a esta canción salí adelante». Es como impresionarte ver cómo puedes tocar otras vidas a través de una canción. La importancia que tiene la palabra ya sea escrita o en canto es súper importante y no sabemos cuándo puede ayudar a alguien. De repente tú dices «no, esta canción es una canción que saqué solo para divertirme y ya». De verdad tomo esta carrera en serio. Mi objetivo es sanar a la gente como a mí me ha sanado la música. Yo puedo tener un mal día y agarro mi guitarra y todo eso cambia. Es mi mayor aprendizaje aprender a vivir ser feliz con lo que tengo, lo que soy y valorar a la familia y a la gente que tienes al lado. No da por sentado nada y seguir luchando por mis sueños y seguir con esa fe en alto, a pesar de todas las cosas pasan en nuestro alrededor y no perder la esperanza y seguir haciendo música por amor al arte.
Es bonito ver que todos estos esfuerzos que has venido haciendo se han venido materializando con el tiempo y ahora se viene un fecha muy importante para ti, si hablamos de conciertos: tu primer Lunario (un venue muy importante allá en México). ¿Cómo te sientes con eso?
Marissa: Estoy muy emocionada. Estoy tratando de asimilarlo. Todavía no me la creo. Es un foro de mis favoritos de Ciudad de México donde he visto a muchos artistas y en practicamente un mes yo voy a estar ahí parada compartiendo la mayoría de mi repertorio a esa gente que me ha seguido durante muchos años, a esos fans que a lo mejor me acaban de conocer, personas que vienen de distintos lugares del país a ese concierto y es un concierto que va a ser mágico. No porque los otros no lo sean, pero como estoy en CDMX puedo llevar más músicos, hacer una escenografía distinta y me emociona muchísimo, porque, como dices, ya son como 7 años de trayectoria y que los voy a celebrar. A parte, ese día coincide con el cumpleaños de uno de los músicos, entonces va a ser una fiesta y se va a gozar y lo voy a tratar de disfrutar al máximo. Como te digo, lo que yo quiero es que sean felices en mi concierto y que bailen. La vida es un baile.
Para tu fecha en La Noche de Barranco va abrir una artista local Analu…
Marissa: Analu tiene una voz muy dulce. La verdad que me gustó muchísimo y creo que es muy importante dar oportunidad a otros artistas como a mí me lo han dado y agradecida con ella también porque ella tiene un arte bellísimo y feliz de colaborar. Eso es algo que me ha dejado la música las colaboraciones conoces artistas nuevos y esos artistas nuevos traen una frescura impresionante que también una aprende no. Muy agradecida con ella y con toda la gente de Oranch que son los que me han ayudado para estar este viernes en La Noche de Barranco. Feliz de estar acá, todavía no me voy y ya quiero volver.
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Sobre Marissa Mur
Marissa es una de las artistas más relevantes de la escena independiente de la industria musical en México, y sin duda, es una artista que promete mucho en el futuro cercano.
Después de publicar su primer álbum, Marissa tuvo un importante crecimiento en en 2017 con «DARLO TODO», canción que se convirtió en un himno entre los mexicanos después del terremoto del 2017. En menos de un mes, la canción alcanzó más de 1.000.000 de streams en Spotify y estuvo en múltiples listas virables y duró más de 25 días siendo la canción Núm. 1 de la lista «Top Viral México».
Tras el éxito de «Darlo Todo», Marissa lanzó su segundo disco de estudio «AMORES», que tenía dos grandes colaboraciones: la primera, con el cantante dominicano Alex Ferreira ,y la segunda, con el cantante venezolano Luis Jimenez de «LOS MESONEROS» Y «LAGOS».
Actualmente la artista nos presenta su tercer álbum de estudio, donde visita las islas del Caribe a través de su música, colores y sabores. En este álbum podrán escuchar una fusión de Pop con ritmos del Caribe como: merengue, bachata, CHA – CHA – CHÁ, calypso, etc.
Marissa Mur ha viajado por México y ha participado de grandes festivales y espectáculos como: Festival Cervantino (Guanajuato), Premios Spority (CDMX), Premios Soberano (República Dominicana), Auditorio Nacional (CDMX), GIFF (San Miguel de Allende), Fiestas del Pitic (Hermosillo), Festival Cielo Mágico (Monterrey), entre otros.
La artista mexicana también se ha destacado por la sincronización de su música en exitosas películas y series mexicanas y latinas como: “Cómo cortar a tu patán”, “A ti te quería encontrar”, “Lo que podríamos ser”, “La boda de la abuela”, “Cómo sobrevivir soltero”, “El testamento de la abuela” y “Madre solo hay dos”.
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